Paramore y My Chemical Romance actuando con amplificadores Marshall.
El emo surgió en los años 80 como una rama del hardcore (su nombre proviene de "emocore", o "hardcore emocional"), pero no fue hasta los años 00 cuando se convirtió en una corriente dominante. Era una época en la que los fans introvertidos se ponían delineador de ojos negro y buscaban consuelo en una música que gritaba: "No estoy bien". Y aunque la subcultura atrajo la atención negativa de algunos sectores de la prensa preocupados por la tendencia de aparente melancolía entre los adolescentes, en realidad era tan incomprendida como la gente que la escuchaba.
El emo proporcionó a quienes se sentían marginados una comunidad que, de otro modo, se les había escapado. Con grupos como Bright Eyes, Paramore y My Chemical Romance como ídolos, la subcultura se extendió internacionalmente a través de las primeras redes sociales como Myspace y Tumblr. Esto permitió a los fans -generalmente adolescentes en una fase de desarrollo de sus vidas- conectar con otros y expresar sus emociones en lugar de reprimirlo todo. Como género musical, el emo defendió la expresión de emociones difíciles, a menudo tratando temas como la salud mental en sus letras.
El emo proporcionó a quienes se sentían marginados una comunidad que, de otro modo, se les había escapado.
Los que participaban en la escena tenían una forma distintiva de vestir: desde vaqueros ajustados, piercings en los labios y camisetas del grupo hasta bandas a cuadros de Hot Topic. Los peinados se teñían de negro o de colores brillantes y antinaturales, y a menudo se cortaban con un flequillo amplio que cubría la mitad de la cara. A pesar de su aspecto único, a los emos se les solía meter en el mismo saco que a los punkis y los góticos, para ira de todas las partes. Los emos eran mucho menos extrovertidos e iracundos que los primeros, y estaban en desacuerdo con los gustos new wave de los segundos. Era inherentemente emo, por supuesto, que no encajaban en ninguno de los dos movimientos en primer lugar.
Estilos Emo y Conor Oberst con Bright Eyes.
Todos estos elementos se sumaron a la sensación de tranquila unión de la comunidad emo, que fomentaba un sentimiento de pertenencia. En 2006, cuando My Chemical Romance publicó su melodramático álbum conceptual "The Black Parade", consolidó la subcultura en la corriente dominante. El álbum se convirtió en una llamada a las armas para que los fans emo se reunieran y se unieran en una declaración de orgullo colectivo, con el desfile negro ficticio del título del disco manifestándose en gran número en el mundo real.
El sentido de comunidad establecido en la subcultura aún perdura. Y aunque la visibilidad de las bandas emo y el fandom de mediados de los años 00 ha disminuido, la escena se contempla hoy con un aprecio mucho mayor del que tuvo en su momento de mayor movilidad.
Actuación de Fall Out Boy.
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